Con menos frecuencia horaria, menos personal, distanciamiento social y protocolos de seguridad, pero con gran predisposición, organización y compromiso con el trabajo, el equipo de Fábrica de ALTEC va de a poco regresando a sus puestos en vías de una “normalidad”.
Entrevistamos a Víctor Rehel y Jaime Díaz, responsables del área, y nos comentaron cómo fue el regreso paulatino a la producción en medio de este momento tan particular que nos atraviesa a todos.
Veníamos viendo cómo era el panorama en las semanas previas el avance de la pandemia y en las últimas dos semanas anteriores a la declaración de la cuarentena, ya comenzamos a trabajar con reducción de personal y a darle licencia al personal de riesgo.
Nos sorprendió el corte abrupto del cierre de la fábrica, informado por las autoridades de la empresa. Esto nos ocasionó una enorme preocupación en cuanto a los compromisos laborales fechados, que tenemos pautados con nuestros clientes, no ajenos a la realidad que ya vivía todo el país con el avance de esta pandemia mundial.
A medida que pasaban las semanas nuestra preocupación crecía por la cantidad de trabajo que debía salir de Fábrica, teniendo en cuenta la importancia económica que significa el cierre de la misma y los trabajos que allí realizamos y considerando que nuestro trabajo es netamente presencial.
De allí, apoyados por Alejandro González, Gerente del Área, y Pipo Pisani, de RRHH, fuimos analizando las posibles vías que estuvieran a nuestro alcance para convocar al personal y plantearles nuestra inquietud, en forma online. Recibimos una amplia y positiva respuesta por parte de la gente para volver a las tareas, por lo que se comenzó un trabajo de planificación previa al regreso. En primer lugar recibimos una capacitación virtual en Bioseguridad, dictado por Seguridad e Higiene. Desde la sede central se nos entregaron todos los elementos para el protocolo de COVID y se realizó una profunda desinfección de fábrica.
El regreso fue por etapas, en la primera de ellas, el 26 de Mayo, volvimos con el 50% del personal por semana y con una carga horaria de 4 horas por la mañana. Es decir el personal trabajaba semana por media.
A partir del 16 de Junio comenzamos la segunda etapa, que es la que transitamos actualmente, trabajando 8 horas diarias en dos turnos de 4 horas cada uno, con el 50% del personal en cada turno. Es decir que hoy estamos todos trabajando todos los días en turnos.
Vale aclarar que la organización en la Fábrica es fundamental, ya que compartimos el espacio físico con nuestro cliente TECNO-ACCIÓN, quienes se han adecuado a nuestra planificación de seguridad.
Actualmente se está trabajando sobre los parquímetros del SEM de Santa Fe. Se están migrando las actuales plaquetas por otras nuevas y que va a permitir tener un mejor control sobre los mismos y una comunicación más estable, lo cual implica poder realizar actualizaciones vía online de manera más confiable evitando una gran intervención en campo. Lo que se busca es mejorar el servicio de soporte y para ello es necesario proveer las herramientas necesarias.
Y como siempre, continuamos con el mantenimiento y soporte a todos los equipos de nuestro cliente Tecno-Acción, que viene de 12 provincias.
En líneas generales, por nuestra experiencia de años, hemos atravesamos algunos contratiempos de índole natural, como grandes nevadas, erupción de los volcanes, pero al igual que a todos nunca esperábamos esta pandemia que sorprendió y sigue asombrando a todo el mundo. Sin lugar a dudas hemos aprendido que los medios de comunicación junto a sus plataformas actuales han sido vitales para mantenernos comunicados y son una herramienta que se ha vuelto fundamental hoy y a futuro, marcando una línea de proyección en la cual Altec como empresa tiene mucho campo para trabajar y explorar.
Se realizó anticipadamente en dos etapas y consistió en reforzar los conocimientos de prevención en los puestos laborales sobre el nuevo virus COVID-19, y de esta manera prepararse para cuando hubiera que retomar las tareas de forma presencial en los diferentes puestos laborales. Esto implica trabajar sobre una conducta en el sentido de desnaturalizar para naturalizar el distanciamiento, el lavado de manos, el uso de mascarilla, la higiene de los puestos de trabajo, etc.
La capacitación consistió en: