IPPV dio solución a un problema histórico para 71 familias sanantonienses
Miércoles 30 de Abril del 2025 - 11:44
Tras muchos años de incertidumbre, 71 familias de San Antonio Oeste recibieron este lunes el Acta de Adjudicación de su vivienda IPPV, durante el acto que encabezó el gobernador Alberto Weretilneck en el Centro de Empleados de Comercio.
Se trata de las viviendas ubicadas en tierras del Sindicato de Trabajadores Viales de Río Negro que nunca habían logrado regularizarse. Luego de más de un año de trabajo con cada familia, IPPV normalizó la situación y llevó tranquilidad a cada una.
La entrega fue acompañada por el interventor del Instituto, Mariano Lavin, quien destacó la importancia de haber dado este paso, “por un lado, porque logramos brindarle seguridad jurídica a todas estas familias que hacía mucho tiempo esperaban una respuesta y no la tenían”.
“Por otro –agregó Lavin-, estamos hablando de que pusimos al cobro a 71 viviendas, lo cual se traduce en nuevos ingresos para el IPPV. Hay que entender que los fondos que se recuperan a través del pago de las cuotas de viviendas, se destinan a la creación de nuevas obras y soluciones habitacionales para más vecinos. Es decir, es un sistema solidario que se retroalimenta entre quienes cumplen y aquellos que están a la espera”.
De la incertidumbre a la tranquilidad
Las viviendas de éstas 71 familias, forman parte de un convenio firmado en 2009 entre el IPPV y el Sindicato de Trabajadores Viales de Río Negro para la construcción de 86 nuevas unidades habitacionales.
En 2011, las familias designadas para ese plan, con el fin de resguardar las viviendas, decidieron hacer una ocupación efectiva de las mismas antes de realizarse el proceso formal de adjudicación, trámite que finalmente nunca se pudo hacer.
Esto significó estar más de 13 años viviendo en una total incertidumbre, años de sinsabores, de angustia y falta de certeza.
Hasta qué, en 2024, la actual gestión del IPPV decidió buscar los medios necesarios para brindarles seguridad jurídica a todas ellas. Era necesario reunirse con los adjudicatarios, estudiar caso por caso y conocer la situación de cada uno.
Luego de un arduo trabajo y a partir de la muy buena predisposición de las familias, se pudo llegar a una solución y permitir que cada vecino pueda tener hoy en sus manos el documento que garantiza que es adjudicatario y adjudicataria de su vivienda.